La cabaña es espaciosa y está súper bien equipada, tiene cocina de 4 platos y un pequeño refrigerador. La cama es grande y cómoda. La terraza es amplia y tiene una parrilla grande. La privacidad es estupenda. La anfitriona es muy amable y está atenta a lo que necesitas.

En verano la cabaña es demasiado calurosa y no tiene sistema de ventilación. Hace falta una ventana en la cocina o que el ventanal pueda ser de corredera. La piscina es grande y profunda, ideal para nadar, pero está tan expuesta que permanece llena de mosquitos y avispas muertas, de hecho caen al lado tuyo mientras te estás bañando y hay que limpiarlas a cada rato, es muy incómodo estar sacando bichos tan seguido. Zancudos y polillas por montón, más que en otros hospedajes del sector

La privacidad y súper atento el personal encargado

El paisaje es muy lindo