La Casa Amarilla se asienta en una extensión de tierra privada, rodeada de árboles y un aire de calma. A excepción de la visita ocasional de los ciervos, puede quedarse aquí en aislamiento total, sin embargo, es solo una caminata de diez minutos a la cafetería Gumboot y otros servicios si el estado de ánimo lo lleva. Un paseo de diez minutos en la otra dirección le da acceso a la playa. Hay una bañera de hidromasaje, una estufa de leña, rincones acogedores y lugares cómodos para leer, escribir o no hacer nada. Es un refugio para el pensamiento creativo. Encontrarás que hay algo en este lugar que trae ideas. Y si te gusta leer, recuéstate en un sofá o una silla de jardín y disfruta de un libro de La pequeña biblioteca de La Casa Amarilla. Si no está realmente interesado en escribir, leer o hacer nada, no se preocupe, se curará durante su estadía.

Hay tres habitaciones: dos tienen camas tamaño queen y una está configurada como estudio / sala de escritura, y el sofá se convierte en una cama futón para dormir una. También tiene un vestidor con un lugar para colgar la ropa.

¿Te apetece ser un escritor en residencia? Solo solicite una carta de aprobación de mi parte y úsela en su solicitud de subvención al Consejo de Canadá o al Consejo de Artes de BC.