El personal 10 puntos. La cocina 10 puntos, principalmente un petizo de anteojos que anda de negro siempre, hacia que todo fluya, la comida bien, nada super sofisticado, las minutas impecables. La ubicación es muy buena, frente a la playa con estacionamiento impecable esto.

Las instalaciones dostan de un 4 estrellas, la puerta de la habitación es de cartón, cerré y se caía el número de habitación qué lo atornillaron tantas veces que estaba rota la puerta. La caja de seguridad s eme ocurrió probar y siempre abre con 123456 y además con las que vos pones, pero siempre abre 123456, así que no deje nada ahí por las dudas, igual era más que nada para documentos no estar con ellos encima todo el tiempo. La pileta estaba bien, pero llena de bichos, de hecho me llego a picar algo a mi a a mi hija, nada más allá de un picazón, pero me tome el trabajo de buscar al costado una red para limpiar y estaba rota, por lo que entiendo que es un tema de recursos más que predisposición del personal. El baño, entiendo que la costa puede ser húmeda, pero un trapeador de piso te dejan, me hace acordar a la hosterías que iba en la costa hace 30 años, incompatible con 4 estellas, hagan bien la bajada del agua, sino te quedan 3 centímetros de agua en el baño, todo mojado. Detalles que hacen a la experiencia. El frigobar de marca reconocida, un ruido toda la noche, y cuando me fui me preguntaron si había comido algo de frigobar, pero estaba vacío, le dije y me dijeron OK. Esas cosas que no terminas de entender, para que te preguntan si no te ponen nada para consumir.